Enrique Arizpe Rodríguez y Alejandro Gracia Gómez, fueron reubicados en Mexicali y Coahuila, pero con la ayuda de Noemí Urias, líder en esa entidad del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación, siguen obstaculizando la impartición de la justicia
Por La Redacción de Cananea TV
El estado de Baja California Sur es un claro ejemplo de la omisión e incumplimiento de los administradores de la justicia, pues en los últimos 14 años, ciudadanos afectados y abogados, se han enfrentado con varias jurídicas, pese a tener resoluciones a su favor.
A pesar de los cambios en aquella entidad de jueces y magistrados, ahora hay que enfrentar la resistencia y omisiones de la base laboral-sindical, ya que aún las indicaciones de sus “mecenas”, que fueron reubicados, insisten en obstaculizar el trabajo de los nuevos magistrados que no responden a intereses familiares ni políticos.
La rotación de magistrados en el Poder Judicial ha generado una gran expectativa en Baja California Sur, donde se registra un gran rezago en la ejecución de sentencias y de revisión de diversos asuntos que fueron “administrados” por los jueces para impedir una verdadera impartición de la justicia.
Integrantes de organizaciones, tales como Abogados Litigantes Laboralistas de Baja California Sur, A.C., la Asociación Civil Legalidad y Transparencia Sudcaliforniana y profesionistas independientes, manifestaron su beneplácito por el cambio de magistrados en el Tribunal Superior de Justicia de Baja California Sur, donde existen expedientes que son “retrasados” por parte del personal sindicalizado que impide una pronta y expedita resolución de los asuntos.
Los profesionales de carrera que forman parte del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación en BCS, que encabeza Noemí Urias, acostumbrados a la forma de “colaborar” con los magistrados Enrique Arizpe Rodríguez y Alejandro Gracia Gómez, ahora hacen “tortuguismo” para entorpecer el trabajo de los nuevos magistrados que están al frente de este órgano judicial.
Hace un mes se realizó, luego de más de 10 años, la rotación de magistrados “fósiles” que ya tenían intereses creados, que formaban parte de las “familias” de la entidad, y los asuntos y procesos en el órgano colegiado, los resolvían de acuerdo a sus intereses y lazos familiares.
Muchos asuntos fueron “entrampados”, y obstaculizados, argumentando incoherencias, por decir, aceptar amparos contra un amparo ya resuelto, entre otros casos.
Los abogados refieren del caso del Hotel Los Arcos, que ya lleva más de 10 años entre el sindicato de los trabajadores y el dueño del inmueble, Luis Coppola, en donde el juez del segundo distrito falló a favor del empresario, reconociendo que solamente 20 de los 78 empleados, realmente laboraban en la conocida pensión, por lo que el líder del Sindicato de Gastronómicos Alberto Rentería Santana, aseguró que solicitaron una revisión a la sentencia, pues la calificó como arbitraria e irregular.
A un mes de la rotación de magistrados, hoy José Luis Delgado Gaytán y Jorge Dionisio Guzmán González, y un secretario sustituto, mientras designan a un nuevo magistrado, enfrentan ahora la “guerra sucia” del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación en BCS, que responden a los intereses de los inexplicablemente ricos funcionarios reubicados.
Se habla que hasta uno de ellos tiene una flotilla de taxis Uber, aseveración que no se ha podido comprobar pero los acusadores no descartan solicitar a la Unidad de Inteligencia Financiera de la SHCP revisar y cruzar los salarios con el enriquecimiento inexplicable de los mencionados magistrados reubicados en Mexicali y Coahuila.
