El Acoso Oficial Contra los Sindicatos Independientes

Los riesgos laborales por buscar nuevas opciones

Las autoridades buscan intimidar al trabajador, generando amenazas en torno a la plaza laboral, así como cambios arbitrarios de adscripción, suspensión de pagos de salarios e, incluso, llegar al extremo de rescisión del trabajo; las dirigencias charras son parte de este hostigamiento que contraviene la Reforma Laboral

 Por Luis Zamora Calzada (*)
Especial para Cananea TV

 El gran reto en la constitución de un sindicato independiente, radica inicialmente en jamás intimidarse ante ninguna represión del estado, la autoridad siempre actuará con acciones tendientes a eliminar la iniciativa de creación de un nuevo sindicato, no controlado por el sistema, como suelen llamar, en esta tarea no les importa la ley, actúan fuera de ella, el romanticismo del estado de derecho, les vale poco.

Sus actuaciones se centran en intimidar al trabajador, generando amenazas en torno a la plaza laboral, como cambios arbitrarios de adscripción, suspensión de pagos de salarios e incluso, llegan al extremo de la rescisión del trabajo.

Suelen reiteradamente vulnerar el entorno laboral, para crear crisis individual, utilizan el acoso laboral del inmediato superior, con seguimientos extremos de la responsabilidad que se cumple, llamadas de atención, sanciones sin razón, amenazas, vigilantes comisionados para reportar todo lo que se hace o deja de hacer, entre otros para colocar como ejemplos de escarmiento a los constituyentes.

Despidos, una forma de intimidar a trabajadores

Realizan cualquier tipo de actuación para dañar la imagen de los constituyentes, buscan supuestos puntos negativos para magnificarlos, crean desprestigio a través de publicaciones en volantes, medios de comunicación escrita, grabaciones, etcétera, para desprestigiar a los trabajadores de la iniciativa.

Por supuesto, la instancia gubernativa, niega la entrega de derechos garantizados en la ley para la organización sindical independiente, obligan a ejercitar demandas e instrumentos para arrancar prestaciones como cuotas sindicales o licencias para ejercer la tarea sindical.

En tanto el sindicato oficial, suele seguir las indicaciones de la autoridad para realizar tareas de inhibición entre los trabajadores, divulgan, por ejemplo, que no se afilien al sindicato naciente porque perderán todos sus derechos, ya no tendrán servicios de salud o que no recibirán el pago de todas las colaterales, incluso aseguran que la plaza es del sindicato oficial, lo cual es falso de toda falsedad, sin embargo, hay trabajadores que se dejan espantar.

Las dirigencias charras se unen más a la autoridad, ahora hay un enemigo común a combatir, les dictan iniciar demandas de cancelación de registro, desafiliaciones, en fin, ponen a su disposición a los tribunales, que actúan a modo y desde el mandato de una instancia gubernativa, como suele ser la Subsecretaria General de Gobierno estatal.

Una práctica recurrente, consiste en infiltrar trabajadores al sindicato independiente para destruir desde el interior, creando divisiones, inconformidades, recopilación de información de afiliados, obtención de datos como direcciones, números telefónicos, para espantar a domicilio y buscar afectaciones.

Funcionarios pisotean la Reforma Laboral

Mantener la cohesión de una directiva, resulta realmente complicado, no todos los compañeros de Comité y Comisiones están dispuestos a aguantar todo tipo de presiones, las reacciones ante las represalias y las acciones en contra, como los cambios que atentan contra el derecho de inamovilidad, los atropellos por parte de una coalición de funcionarios del gobierno del gobierno estatal y las educativas, generan diferente tipo de reacciones que iremos enumerando.

Los ataques de los incondicionales y aplaudidores, de los “barberos” de un modelo sindical caduco, que ha devaluado la imagen del trabajador, estarán a la orden del día, el gran secreto, aguantar y combatir en términos de ley.

A pesar de todo, a casi catorce años del inicio del sindicalismo independiente en el Estado de México, hoy existen cuatro sindicatos independientes, en estricto orden de aparición, los siguientes:

“Sindicato Unificado de Maestros y Académicos del Estado de México” (SUMAEM).

“Sindicato de Trabajadores del Sistema Nacional de Salud”, Sección 35, Valle de Toluca.

“Sindicato Independiente de Trabajadores de los Municipios y del Estado de México” (SITMEM).

“Sindicato Independiente del Personal Académico de la Universidad Autónoma del Estado de México” (SIPAUAEMEX).

La lucha por la libertad sindical y la justicia laboral rinde frutos, la gran responsabilidad y tarea constante del sindicalismo independiente: informar a los trabajadores, mostrar la protección legal del sindicalismo en lo nacional, los convenios internacionales de la Organización Internacional del Trabajo y recientemente, el capítulo 23 tratado de libre comercio, el T-MEC.

La lucha se fortalece, la necedad gubernativa estatal sigue, los trabajadores se alejan de un letargo sindical impuesto por el gobierno, el panorama queda en sus manos.

La ganancia del magisterio

Las pretensiones gubernativas de regresar a clases presenciales, han provocado gran tarea administrativa, para reportar datos de maestros que integrarán las listas que recibirán la vacuna contra el COVID-19.

En estos listados, también se incluyen a trabajadores no decentes que laboran en las escuelas.

(*) Secretario General del SUMAEM.

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