Indiferencia del Rector Garduño ante planteamientos en el Consejo Universitario
A solo unas semanas de haber tomado posesión de su cargo, Ángel Garduño García, colocó en puestos de primer nivel a gente presuntamente ligada a Antorcha Campesina; la violencia y represión no se han hecho esperar al destituir y desalojar de manera por demás violenta, a funcionarios como la Jefa del Departamento de Talleres Culturales, cuyas chapas de su oficina fueron rotas en un claro allanamiento para imponer un sucesor, sin ser electo de manera democrática. Aires de violencia porril ya soplan en la UACH
Especial de Cananea TV
A solo 19 días de haber protestado el cargo y comprometerse a respetar los estatutos de la Universidad Autónoma de Chapingo (UACH), en bien de la comunidad estudiantil y académica, el nuevo rector, Ángel Garduño García, mostró su lado intolerante y represor en contra de los profesores del Departamento de Talleres Culturales, al consentir el pasado 25 de abril, el allanamiento de las oficinas de su titular, Rosa Ivette Tapia Silva.
La profesora fue además despojada ilegalmente de su cargo, no obstante haber sido electa en forma democrática por la mayoría de los integrantes de dicha área, tal como se estableció en los procesos de democracia interna de esa casa de estudios desde 1993. Tapia Silva concluiría su periodo de tres años en septiembre próximo, pero de manera inexplicable se permitió que las chapas de su cubículo fueran rotas con la anuencia de la nueva Directora de Difusión Cultural, Tania Jessica Pérez Buendía, en lo que los profesores de este departamento calificaron como una acción porril, contraria al sano ambiente académico que, al parecer, empieza a diluirse con la llegada de personajes ligados a Antorcha Campesina.
Prueba de este presunto pago de facturas de Garduño García a la beligerante organización, dedicada en muchas partes del país a los despojos de tierras y viviendas, de manera violenta, es la llegada como Subdirectora del Área Cultural de Evangelina Rodríguez Carranza. De acuerdo a las redes sociales de Antorcha, se le ubica como profesora de sus planteles y ahora arriba a un cargo de primer nivel en la UACH.
El reciente 6 de abril, cuando tomó posesión ante representantes de la SADER y legisladores federales como el Senador José Narro, el nuevo rector señaló: “La difusión cultural deberá ser un instrumento necesario para fortalecer la formación integral de nuestros estudiantes, no solo calificados sino con una visión humanista…”
Pero en los hechos, fue precisamente en el área cultural donde se inició con el pie izquierdo, violentando la libre decisión de la mayoría de los 11 profesores que forman parte del Departamento de Talleres Culturales y quienes desde 1993, se ganaron el derecho a ser ellos mismos los que de manera democrática eligen por periodos de tres años a sus titulares.
Tras la inusual e inexplicable agresión, la profesora Rosa Ivette Tapia, obtuvo el apoyo de siete de los once miembros de su área, pues de forma impositiva se dio posesión a Rodrigo Alonso Sánchez, maestro que a pesar de conocer perfectamente que los sistemas de elección y periodos en su área deben respetarse puntualmente, aceptó ser impuesto sin el voto de sus compañeros en una clara imposición de la nueva Directora de Difusión Cultural, Tania Jessica Pérez. Y peor todavía, guardar silencio ante la violación a las chapas de las oficinas de la titular aún en funciones.
El lunes 8 de mayo, durante la Sesión del Consejo Universitario de la UACH, el Rector debió aceptar a regañadientes que uno de los profesores del Área Cultural, leyera un documento fijando la posición de la mayoría de sus integrantes y pidiendo respeto a lo que se considera una de las más legítimas expresiones de la democracia interna en dicha cada de estudios. Varios de los asistentes cedieron su uso de la palabra para que se diera cuenta de los excesos cometidos en los Talleres Culturales.
Acompañado a su diestra por el Secretario Técnico del Consejo Universitario, Noé López Martínez, el rector guardo mutis y se mostró indiferente ante los argumentos del académico quien resaltó la excelsitud cultural lograda durante la gestión de la maestra Tapia Silva, enumerando las diversas actividades artísticas, literarias y musicales que han puesto en alto en diversos foros a la UACH.
Tampoco dio contestación al escrito enviado a su escritorio el 27 de abril donde se detalló paso a paso la agresión cometida contra la ahora ex Jefa de Departamento. Pero así como el nuevo rector busca borrar de un plumazo la democracia académica ganada a lo largo de 30 años, se habla ya de por lo menos 20 destituciones de personal al que considera no afín a sus intereses político y al pago de facturas políticas, lo que puede comenzar a generarle un problema legal en los tribunales laborales.
Los profesores del área agredida, exigen respeto a su labor y se han expresado en resistencia ante la ilegalidad y violencia aplicadas en contra de la profesora Tapia Silva. De la parte sindical, los académicos han obtenido como respuesta la promesa de una reunión de conciliación, cuyos resultados no apuntan a buen arreglo, sobre todo por la forma intolerante y agresiva mostrada por la gente del nuevo rector, que parecen haber olvidado una palabra que debe priorizarse en los recintos universitarios: Diálogo.
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