La inflación fue más alta en gobiernos neoliberales como el de Zedillo que en la 4T
Tan solo en el segundo año de Ernesto Zedillo, la inflación se incrementó más del 55%; en igual periodo, el gobierno de AMLO, llegó apenas a 3,5% y en 2020, por factores externos, se situó en 8% previéndose para 2023 en no más del 5%, lo que desmiente el mito neoliberal de que aumentar los salarios dispara la inflación
La Carta Robada
Por Emilio López Gámez (*)
Especial para Cananea TV
Joseph E. Stiglitz en su ensayo “Empleo, justicia social y bienestar de la sociedad” (Revista Internacional del Trabajo, vol. 121 (2002), núm. 1-2, sostiene que “La inflación sólo es preocupante en la medida en que conduce a resultados reales peores, tales como menor crecimiento, más pobreza y mayor desigualdad.”
Para el movimiento campesino Plan de Ayala Siglo XXI (MCIAPASXXI) es imprescindible erradicar la desigualdad: la participación del capital y el trabajo en el ingreso nacional indica un abismo: mientras el capital tiene una participación del 60 al 70% del ingreso, el trabajo tiene una participación del 30 al 40%. Esa es la base de los males económicos de los pueblos que aumenta la desigualdad. Reto: erradicar esa brecha (por ejemplo, aumentando la capacidad de compra de los trabajadores).
Para el MCIAPASXXI erradicar la desigualdad es fundamental por ello parten del pacto del 10 de abril del 2018 que las organizaciones campesinas firmaron con Andrés Manuel López Obrador : “Un nuevo campo mexicano supone un Proyecto Alternativo de Nación (…) suscribimos este Pacto de organizaciones campesinas y Andrés Manuel López Obrador para la puesta en marcha de un nuevo modelo de desarrollo rural que tenga como ejes: la Soberanía Alimentaria; la política de Estado; la reorientación del gasto público hacia las pequeñas unidades de producción; el comercio con una agenda de desarrollo; la Agroecología; la defensa del Territorio, el Ejido, las Comunidades; las Aguas y la Biodiversidad; el Derecho a la Agroalimentación Nutricional y a la vida libre de violencia”. Sobre tales ejes, el movimiento agrario no ha dejado de hacer propuestas contribuyendo con la producción de alimentos
ECONOMÍA CAMPESINA CONTRA LA INFLACIÓN
Las encuestas del Banco de México, de diciembre del 2022 y febrero del 2023 (Encuesta sobre las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado) muestran que la inflación general comparando el año 2022 contra 2023 disminuirá del 8% al 5%. Las encuestas fueron recabadas entre grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero.
En el tema inflacionario y la pérdida de la capacidad de compra de los trabajadores, el modelo neoliberal es el rostro de la crueldad contra los trabajadores: el modelo contuvo los salarios (pérdida en la capacidad de compra en un 70%), precarizó a la fuerza de trabajo y ello repercutió en las condiciones de vida y sobre todo alimentarias de la población. Comparaciones entre el modelo neoliberal y el pos-neoliberal actual; el gobierno de Zedillo al contrastarlo con el de AMLO muestra es que éste ha estado impulsando una política de industrialización generadora de empleos que, los gobiernos, como el de Zedillo, destrozaron.
La inflación se incrementó más del 55%, en el segundo año de Zedillo, en tanto que AMLO andaba también, en su segundo año, en 3,5%. Con AMLO para el 2022 la inflación, sobre todo imputable a factores externos, se situó en el 8%, y está la expectativa de situarse el año 2023 en un 5%. Se están tomando medidas emergentes y las expectativas son mejores. Obviamente el manejo de la inflación es mucho mejor con AMLO que con Zedillo. De ahí se deriva la importancia de la producción de alimentos de calidad y nutritivos (base de la soberanía alimentaria) en manos de los campesinos y los indígenas.
Sabemos que es inapropiado hablar de incremento de precios si no se contrasta con los niveles de ingreso de la población. El nivel inflacionario es un reto para la 4T y base fundamental para no repetir permanentemente la pérdida adquisitiva de la población; pérdida adquisitiva que es muy importante señalar en el caso de la 4T está siendo superada por las políticas de incremento de los salarios mínimos del actual sexenio.
Ahí podemos observar otro contraste, entre el gobierno de Zedillo y el de AMLO, ya que en este último se ha iniciado un proceso de recuperación de esa capacidad de compra (vía salarios mínimos y promedio de los asegurados en el IMSS) que, avanza, aunque presenta dificultades (como el caso de los salarios contractuales contenidos).
LAS DIFERENCIAS EN EL COSTO DE LA CANASTA BÁSICA
Las condiciones para los trabajadores, entre un gobierno y otro son muy evidentes, como vemos. Considerando la fecha de comparación del periodo de Zedillo de enero de 1995 a diciembre de 1997, observamos que, para enero del 1995, el costo mensual de la canasta alimentaria rural, era de 135. 76 pesos y ya para diciembre de 1997, ese costo era de 290.37 pesos. Entonces la canasta alimentaria rural presentó un incrementó de 113%. En cambio, para el periodo de AMLO, considerando sus primeros tres años, enero de 2019 a diciembre del 2021, la canasta alimentaria rural tuvo un incremento de 20%, pasando de un costo de 1120.44 pesos mensual a 1344.94 pesos mensual.
Contrario a los intereses de los grupos privados que desean seguir manejando las estructuras de los mercados (que favorecen al capital) sobre todo el de alimentos, a pesar de los incrementos de algunos precios, la capacidad de compra del mexicano es hoy superior a los periodos neoliberales. Cuando inició la 4T el salario alcanzaba para tres kilos 100 gramos de frijol, ahora alcanza para cinco kilos 100 gramos; en el caso del huevo para inicios del sexenio se podían comprar 3.2 kilos ahora se pueden comprar 4.7 kilos. En el caso de la tortilla, que se ha incrementado, alcanzaba para 6.5 kilos y ahora alcanza para 10.1. Sí comparamos el incremento de los salarios mínimos es apabullante; la diferencia entre Enrique Peña Nieto y AMLO: durante todo el sexenio de Enrique Peña Nieto el salario se incrementó en 36.4%, en tanto que a la mitad del sexenio de AMLO (los primeros tres años) el incremento de los salarios está en un 95.7%.
Con Enrique Peña Nieto el salario durante el 2018 fue de 88.36 pesos y el precio del kilo de tortilla fue de 14.33; entonces con un salario mínimo se podían comprar 6.1 kilos de tortilla y actualmente (para el año 2023) con un salario mínimo de 207 pesos diarios con AMLO y con un costo de la tortilla de 22.66 pesos, se pueden comprar 9.1 kilos de tortillas. Y en el caso del huevo con EPN se podrían comprar 2.7 kilos de huevo, ahora con AMLO se pueden llegar a comprar casi el doble de kilos de huevo.
(*) Doctor en Economía por la Universidad de Chapingo y experto en temas agrarios.
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