El agro mexiquense puede impulsar la autosuficiencia alimentaria del país, con Gómez Álvarez
La definición que adopte la futura gobernadora en el agro mexiquense, contribuirá a superar el enfoque neoliberal de dependencia alimentaria que ha sido dominante a nivel nacional. El Estado de México ha tenido una de las principales contribuciones en la producción nacional de maíz, pero esa participación a caído en los últimos años. Una acción inmediata será fortalecer presupuestos y programas que cayeron en los últimos años, en esa entidad. Los productores de la pequeña y mediana agricultura, a nivel nacional producen el 70% del maíz que se consume en el país y son este tipo de productores los que han sido más afectados, en el EdoMéx, con los recortes presupuestales, lo que ha aumentado las importaciones.
La Carta Robada
Por Emilio López Gámez (*)
Especial para Cananea TV
Sin duda, un componente central en el diagnóstico de la problemática rural son las fuertes presiones de empresas transnacionales y del gobierno norteamericano y, consecuentemente, sus impactos en la producción de alimentos y el acceso de las familias mexicanas a estos; nos referimos tanto a la política agropecuaria pero se asocia también a la política agraria, política alimentaria y política industrial, en el caso de esta última, tenemos como ejemplo la producción asociada directamente con el territorio rural, como es el caso de la minería, todas las cuales le dan forma a la espacialidad del capital tanto extranjero como nacional.
En lo que va de este sexenio las presiones son una constante lo que podemos ejemplificar con la protesta de abril del 2021, cuando agricultores de EU, expusieron su desacuerdo con el decreto de AMLO que prohíbe en México, el uso de transgénicos y glifosato, porque eso representa, para esas transnacionales, un fuerte riesgo para su negocio en la exportación de granos a México.
Situación que sigue hasta el presente y que continuará en el próximo sexenio y tendrá, como actualmente tiene, graves repercusiones en la producción nacional de alimentos y la inflación que se viene repitiendo en las últimas décadas y en cuya solución pueden jugar un papel muy relevante algunas entidades del país como es el caso del Estado de México. De ello, resulta obvio la necesidad de un cambio de rumbo, que supere el enfoque neoliberal, en la conducción de las políticas públicas rurales.
Base para el análisis de la producción de alimentos, sobre todo de granos lo representa el gasto rural y su relación en el caso de agricultura y el desarrollo rural en suelo mexiquense, lo cual nos invita a la elaboración de una propuesta para la próxima administración en el Estado de México que implica, entre otros aspectos, el análisis de los Recursos Federales Identificados para el caso de agricultura y desarrollo rural y el análisis de los recursos del Programa Especial Concurrente (PÉC) a nivel nacional y sus repercusiones en la producción agropecuaria en esa importante entidad.
La importancia del maíz mexiquense en el próximo gobierno estatal
En ese contexto, un tema que hay que contemplar es el tema de la producción agropecuaria, por ejemplo, el maíz en el Estado de México, con el objetivo de desarrollar posteriormente otros temas que nos interesen a las organizaciones campesinas y poderlos incluir en un paquete de propuestas para el próximo gobierno estatal.
Un argumento central aquí es tratar, tangencialmente por ahora, el tema del presupuesto a partir de los recursos identificados para los Estados de la federación, aprobados en la cámara de diputados, en lo que va desde el gobierno de Enrique Peña Nieto y el sexenio de AMLO ya que los programas básicamente productivos de ese conjunto de recursos fueron drásticamente disminuidos, eliminados, o reubicados (los menos).
Consideramos que este tema es central rumbo a la próxima administración estatal del Estado de México, en tanto los recursos identificados para su agro sufrieron un profundo cambio, por otro lado los recursos federales centrados en las dependencias del ejecutivo federal, han sido castigados por los menos los últimos 8 años, ya que a partir del 2015 se empezó a registrar una caída de esos recursos, tanto los del PEC a nivel nacional, como los Recursos Identificados para el EdoMéx, aprobados en la Cámara de Diputados.
Los cambios asociados en los programas en lo que va del sexenio de AMLO han contribuido, entre otros factores con algunos problemas como la contracción de la producción de alimentos, como es el caso del maíz, directamente identificado como un alimento básico, cuyo incremento del valor en los mercados ha provocado un proceso muy fuerte inflacionario con repercusiones negativas en el acceso a alimentos de parte de la población.
A manera de ejemplo, de los Recursos Identificados para el Estado de México de un grupo de 5 programas que había para el año 2018 sólo permanece, para el año 2023, un programa. Los programas que aparecen ahora en los Recursos Identificados para el Estado de México, en el presupuesto para el año 2023, son tres programas en el ramo agricultura e identificados para el Estado de México, tenemos: El programa de abasto rural a cargo de Diconsa S.A. de C. V. tiene 0 recursos; es decir no tiene recursos asignados. El programa de abasto social de leche a cargo de Liconsa s. a. de c. v. tiene asignados 372.7 millones de pesos. El programa de sanidad e inocuidad agroalimentaria tiene asignados 0 recursos.
Para el año 2023, entonces solo el programa de Liconsa tiene recursos asignados, por lo tanto, para el Estado de México, en el ramo 08 que es agricultura y desarrollo rural, de recursos identificados para los Estados de la federación para el Estado de México, a diferencia de los programas identificados en el sexenio anterior, que ya no aparecen (en otra Carta Robada daremos cuenta en un análisis más detallado de los cambios en esos programas productivos) actualmente ya sólo está el programa de Liconsa con esos 372.7 millones de pesos.
Presiones internacionales y nacionales en el tema del maíz
El estancamiento en los últimos años del PEC (del 2015 a la fecha) a nivel nacional y de los Recursos Identificados para los Estados de la Federación ha tenido consecuencias graves en la producción de alimentos: a.-El PEC presenta una caída en términos reales a partir de la segunda mitad del gobierno de Enrique Peña Nieto que se ha prácticamente mantenido hasta el 2023. b.-Lo mismo se puede decir del presupuesto de la SADER. c.-Eso ha tenido consecuencias como el estancamiento en la producción de granos, aquí se incluye el caso del maíz, cuya producción se ha mantenido estancada, dados sus incrementos muy leves, año con año. d.- Ello ha repercutido en problemas de coyuntura como el incremento de precios de los granos a nivel internacional y elevación en el valor de las importaciones, que como en el caso del maíz, ha elevado el precio de los productos internamente, dados los valores elevados de las importaciones y por consecuencia sus impactos inflacionarios.
Aquí es clave saber para propósito de toda propuesta que la producción de la pequeña agricultura, más la de los grupos medios de agricultores en México, representan cerca del 70 % del maíz que el pueblo consume; saber que México importa cada año 17 millones de toneladas de maíz, fenómeno acrecentado por el enfoque neoliberal de los mercados.
En ese contexto el Estado de México es central en cualquier proyecto que con un enfoque no neoliberal busque superar la dependencia alimentaria. En el Estado de México el valor de la producción del maíz grano y el maíz forrajero presentó caídas en los últimos años del periodo de Enrique Peña Nieto y al inicio del periodo de Andrés Manuel López Obrador. También en el Estado de México en los últimos años se ha presentado una caída en el volumen de la producción. Para empezar, habría que revertir los impactos negativos señalados y tomar también otras medidas que analizaremos posteriormente.
(*) Doctor en Economía por la Universidad de Chapingo y especialista en temas agrarios.
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