La Corte dejó a la deriva laboral a los científicos mexicanos
Preocupa la creación de la Compensación Garantizada pues no tendrá beneficio en prestaciones sociales como antigüedad y ha sido una herramienta precarizadora de los sueldos, abriendo la posibilidad de que los próximos aumentos salariales se impongan asumirlos en ésta. La actual política laboral del cangrejo hace que sea muy mal momento para trabajar por el desarrollo de la ciencia y la tecnología de México
Por Mtro. Julio Antonio García Palermo (*)
Especial para Cananea TV
La interpretación e implementación de la jurisprudencia P.J.10/2021 ha obstaculizado el acceso a derechos laborales a dos sindicatos de centros públicos de investigación. En estos casos, fueron a amparo y hasta el momento se ha ganado uno.
Es así que entre confusiones, amparos y violaciones a derechos humanos laborales, ha pasado un año desde que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) sustituyó la jurisprudencia P.J. 1/1996, la cual permitió a los organismos públicos descentralizados transitar hacia el apartado A; la ministra Esquivel y el ministro Laynez no pueden argumentar falta de información, pues por medio de videos, desplegados, cartas y plantones de sindicatos, además de dos exhortos de la Cámara de Senadores, se les informó las consecuencias de sustituir la jurisprudencia. Lo que sí les faltó fue la intención de abrir espacios para ampliar el debate.
Por otra parte, el Sindicato Unitario de Trabajadores Administrativos, Técnicos y Académicos de El Colegio de la Frontera Sur (SUTECOSUR) no recibió la constancia de representatividad por parte de la Coordinación General de Registro de Asociaciones del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL), aunque ya tienen firmado un Contrato Colectivo de Trabajo entre el sindicato y de El Colegio.
Adicionalmente, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público reiteró por medio del oficio No.315-A-4341, que la esta política salarial y la compensación garantizada es de carácter general y de aplicación a todas las dependencias de la Administración Pública Federal; es decir, ¡la Precarización Garantizada, va porque va!
Lo anterior afecta prestaciones y seguridad social de los compañeros de la Secretaría de Cultura, del Banco Nacional de Comercio Exterior y a los trabajadores de los 26 centros públicos de investigación adscritos al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT). Específicamente, causa preocupación la creación de la Compensación Garantizada pues no tendrá beneficio en prestaciones sociales como antigüedad y ha sido una herramienta precarizadora de los sueldos, sobre todo sorteando la posibilidad de que los próximos aumentos salariales se nos imponga asumirlos en ésta. La actual política laboral del cangrejo hace que sea muy mal momento para trabajar por el desarrollo de la ciencia y la tecnología de México.
Las batallas que hoy en día tiene el sector de ciencia y tecnología son: la negación del otorgamiento de constancia de representatividad al SUTECOSUR, la posibilidad de que no acepten los pliegos petitorios a sindicatos del sector que estuvieron en el apartado B antes de cambiar al A y el estancamiento de las prestaciones por medio de la creación de la compensación garantizada.
¿Hacia dónde vamos?
(*) Asesor sindical